Comunidad, pertenencia, extranjería desvela el papel central que tuvo la migración laboral y mercantil de la región del Mar del Norte en el virreinato de la Nueva España durante un periodo crítico de la formación de las sociedades coloniales. Lejos de ser una migración marginal, como hasta ahora se ha creído, la presencia de migrantes septentrionales fue estratégica para la expansión y el mantenimiento de la monarquía hispánica por su aporte de mano de obra, de conocimientos tecnológicos, de redes comerciales y de capital transnacional. A partir del análisis transversal del impacto de esta migración en la sociedad, la política y la economía novohispana, este trabajo muestra como es imposible contar la historia del imperio español sin tomar en cuenta el papel que los europeos no españoles tuvieron en su formación y evolución.